A
escasas jornadas para llegar al punto y final en la mayoría de las
grandes ligas, podemos decir que en cada uno de los campeonatos
europeos ha habido un equipo revelación. En España, ese papel lo ha
jugado el Levante, cuyo objetivo era la permanencia a principios de
temporada y con un plantel plagado de jugadores veteranos y otros
semidesconocidos, está peleando de tú a tú por la clasificación a
la Champions con clubes de presupuestos muchísimo mayor como Valencia
o Málaga. La Premier tiene esta temporada como equipo “sorpresa”
al Newcastle, que si bien es uno de los históricos de Inglaterra y
con una gran masa social tras de sí, no partía con aparentes
posibilidades de colarse en ese “top four” que da derecho a estar
en la máxima competición continental a nivel de clubes la próxima
campaña. Trasladándonos a la Bundesliga, podríamos decir que el
equipo que ha irrumpido entre los grandes de forma inesperada ha sido
el Borussia Mönchengladbach, que durante gran parte del curso estuvo
luchando por el primer puesto junto a Borussia Dortmund y Bayern, y que jugará
la ronda previa de la próxima Liga de Campeones. Pero sin dudas, si
hay que elegir al equipo revelación con mayúsculas del fútbol
europeo, ese es el Montpellier. Un equipo humilde, mezcla de juventud
y experiencia, que de la mano del técnico René Girard ha conseguido
un grupo muy sólido, que se ha afianzado en lo más alto de la
clasificación, disputándole el primer puesto al multimillonario
PSG, con la posibilidad de conquistar para sus vitrinas el primer
título liguero de su historia. Del compacto conjunto montpellerino
destacan sobre todo dos futbolistas, que se han convertido en sus
máximos estandartes y cuya cotización en el mercado sube como la
espuma. Se trata del “killer” y máximo realizador del
campeonato, Oliver Giroud, y del mediapunta franco-marroquí Younés
Belhanda. Pero además de sus dos estrellas, también cabe destacar
el papel de jóvenes como Mapou Yanga Bwiga, Karim Aït-Fana, o
nuestro protagonista de hoy, que no es otro que Rémy Cabella, 22
años, (9 de Marzo de 1990, Ajaccio, Francia), que en su primera
temporada en el primer equipo del Montpellier se ha destapado como una de sus perlas de
mayor futuro.miércoles, 25 de abril de 2012
Rémy Cabella
A
escasas jornadas para llegar al punto y final en la mayoría de las
grandes ligas, podemos decir que en cada uno de los campeonatos
europeos ha habido un equipo revelación. En España, ese papel lo ha
jugado el Levante, cuyo objetivo era la permanencia a principios de
temporada y con un plantel plagado de jugadores veteranos y otros
semidesconocidos, está peleando de tú a tú por la clasificación a
la Champions con clubes de presupuestos muchísimo mayor como Valencia
o Málaga. La Premier tiene esta temporada como equipo “sorpresa”
al Newcastle, que si bien es uno de los históricos de Inglaterra y
con una gran masa social tras de sí, no partía con aparentes
posibilidades de colarse en ese “top four” que da derecho a estar
en la máxima competición continental a nivel de clubes la próxima
campaña. Trasladándonos a la Bundesliga, podríamos decir que el
equipo que ha irrumpido entre los grandes de forma inesperada ha sido
el Borussia Mönchengladbach, que durante gran parte del curso estuvo
luchando por el primer puesto junto a Borussia Dortmund y Bayern, y que jugará
la ronda previa de la próxima Liga de Campeones. Pero sin dudas, si
hay que elegir al equipo revelación con mayúsculas del fútbol
europeo, ese es el Montpellier. Un equipo humilde, mezcla de juventud
y experiencia, que de la mano del técnico René Girard ha conseguido
un grupo muy sólido, que se ha afianzado en lo más alto de la
clasificación, disputándole el primer puesto al multimillonario
PSG, con la posibilidad de conquistar para sus vitrinas el primer
título liguero de su historia. Del compacto conjunto montpellerino
destacan sobre todo dos futbolistas, que se han convertido en sus
máximos estandartes y cuya cotización en el mercado sube como la
espuma. Se trata del “killer” y máximo realizador del
campeonato, Oliver Giroud, y del mediapunta franco-marroquí Younés
Belhanda. Pero además de sus dos estrellas, también cabe destacar
el papel de jóvenes como Mapou Yanga Bwiga, Karim Aït-Fana, o
nuestro protagonista de hoy, que no es otro que Rémy Cabella, 22
años, (9 de Marzo de 1990, Ajaccio, Francia), que en su primera
temporada en el primer equipo del Montpellier se ha destapado como una de sus perlas de
mayor futuro.jueves, 19 de abril de 2012
Adam Maher

Pese a nacer en Marruecos, Adam Maher se trasladó a Holanda a muy temprana edad, por lo que posee la doble nacionalidad y ha decidido representar a la selección tulipana, al menos en categorías inferiores. Su andadura en el mundo del balompié comenzó en el modesto SV Diemen, para posteriormente pasar al AVV Zeburgia. Tenía 11 años y los 'cazatalentos' del AZ Alkmaar pusieron en el sus ojos con el fin de incoporarlo a los escalafones inferiores del club, en los cuales se ha ido formando y ascendiendo por cada uno de los equipos, dando buena muestra de poseer un futuro más que prometedor. Su debut con el primer equipo del AZ llegó a finales de 2010, en un encuentro de Europa League que enfrentó a los holandeses ante el Bate Borisov, donde no necesitó demasiado tiempo para anotar su primer gol en categoría profesional. De ahí al final de temporada tuvo algunos minutos más, aunque sin demasiado protagonismo, todo el que si está teniendo en la actual, en la que desde el principio se ha erigido como uno de los hombres claves para el técnico Jant Verbeek, ganándose un puesto como titular en numerosos encuentros, tanto en la competición doméstica como en la Europa League. Pero no solo en su club ha ido demostrando todo el potencial que lleva dentro, también ha sido un fijo en las categorías menores de la selección “orange”, siendo internacional sub-17, sub-19 y actualmente todo un fijo con la sub-21, demostrando una vez más la rapidez con la que va escalando peldaños en su progresión.
Adam Maher es un centrocampista de perfil netamente ofensivo, que suele jugar en un sistema de 4-3-3 por delante de dos mediocentros, aunque también puede caer escorado a cualquiera de los dos costados. Diestro, no muy alto y con gran dinamismo, suele tener total libertad de movimientos en la zona de tres cuartos, aunque ello no le es óbice para ayudar en el mediocampo en tareas de contención. Dotado de muy buen nivel técnico y con un notable manejo de la pelota, pese a no tener demasiada corpulencia protege el balón de forma sensacional, siendo realmente complicado arrebatárselo. Seguro en el pase, le gusta combinar con pocos toques. Quizás la faceta en la que más debe mejorar es la de su regularidad, ya que desaparece muchísimo durante los encuentros y apenas suele participar en la elaboración del juego de su equipo. Tiene un buen golpeo de balón desde media distancia, el cual no duda en ejecutar cada vez que encuentra la ocasión. Su juego se ilumina conforme se acerca al área rival, de hecho una de sus grandes virtudes es su capacidad para llegar por sorpresa desde segunda línea, poseyendo una gran clarividencia para asociarse en los últimos metros con los delanteros y una habilidad especial para ver puerta, como así demuestran sus 5 goles en liga, 3 en Copa y otros tantos en Europa League. Su talento, progresión y
facilidad para hacer gol no han pasado desapercibido para los ojeadores de los equipos más potentes de Europa, y los rumores sobre el interés de clubes como el Barcelona, el Arsenal o el Manchester City ya se han disparado, aunque de momento el joven Maher solo se centra en ayudar a repetir el título liguero conseguido por su club en 2009.
