Serge Aurier

Hace tan solo tres años, los incondicionales aficionados del Lens vieron como su equipo se despeñaba dolorosamente hacia la Ligue 2, cuando apenas 10 años antes estaba tocando el cielo tras conquistar su primera liga. Ahora, y si la situación no da un giro radical, parece que esa situación puede volver a repetirse y que el equipo “sangre y oro” tiene muchas papeletas para perder la categoría. Para encontrar los motivos que tienen al Lens como uno de los peores conjuntos de Francia, quizás haga un análisis muy exhaustivo, pero sin duda uno de los culpables es una plantilla con una importante carencia de calidad y también, porque no decirlo, de juventud, ya que hay pocos jugadores prometedores en las filas del cuadro rojo y amarillo, y en los últimos años es bastante extraño que se le den oportunidades a un cantera que tradicionalmente ha sido una de las más importantes del país galo. Por el mal momento deportivo o por la falta de medios económicos para reforzarse, lo cierto que en los últimos tiempos si estamos viendo algún que otro jugador criado en la casa y que lo están haciendo igual o mejor que los foráneos, algo cuanto menos para hacérselo mirar. El futbolista que hoy os quiero presentar es de los pocos a los que se les ve con bastante futuro en la plantilla del Lens, su nombre es Serge Aurier, 18 años, (24 de Diciembre de 1992, París, Francia).

Serge Aurier, que tiene la doble nacionalidad franco-marfileña, ya que tiene ascendencia en Costa de Marfil, comenzó a jugar en el modesto Villepinte, desde el que pasó al Racing Lens en el año 2005, ingresando en los escalafones inferiores en los que se ha terminado de formar. Con el primer equipo debutó a comienzos del 2009, en un encuentro de la Copa de la Liga. Poco a poco ha sus apariciones en el primer equipo han ido aumentando, hasta que en esta temporada ya ha jugado un total de 22 encuentros en Ligue 1, convirtiéndose en uno de los jugadores que más minutos ha disputado. Con el Lens tiene contrato hasta Junio de 2013, aunque tampoco sería nada raro que ambas partes buscaran una salida si el equipo no consigue mantener la categoría, tarea que a pocas fechas del final de liga, tiene realmente complicada.

Serge Aurier es un lateral diestro, no muy espigado, 1,74 metros de altura, pero si con una buena complexión física, que le hacen ser un jugador fuerte y potente. En tiempos en los que priman los carrileros súperofensivos, que incluso en muchas ocasiones descuidan la defensa, Aurier es precisamente el prototipo contrario, un lateral que antepone la seguridad defensivas a las alegrías atacantes y que convierte su posición en un muro casi infranqueable para los contrarios. Rapidísimo y muy impetuoso en todas sus acciones, es tremendamente pegajoso en el marcaje, le gusta cubrir muy de cerca al rival y concederle pocos espacios, convirtiéndose en muchas ocasiones en una pesadilla para el atacante, al que no deja y agobia casi antes de que le llegue el balón. Atento, dificilísimo de superar en el uno contra uno, habitúa a llevar al rival al plano físico para que le intente desbordar, aspecto que el domina a las mil maravillas, ya que es enormemente fuerte y sale vencedor en la mayoría de ocasiones en el cuerpo a cuerpo. Luchador, batallador y con una técnica aceptable, no es un prodigio con el balón en los pies, pero se complica poco en defensa y se maneja bastante bien cuando tiene que incorporarse arriba. Cuando lo ve claro tampoco rehuye a recorrer todo el carril para aparecer por el ataque, normalmente usando su velocidad, tanto para desmarcarse como para marcharse del oponente. Aurier es un oasis de esperanza en el desolador desierto del Lens, que ve como se le va nuevamente la vida en la máxima categoría y como una de sus grandes esperanzas viene de la cantera, quizás la solución.